jueves, 21 de octubre de 2010

Lazos Familiares

estos lazos familiares nos ayudan  en nuestra vida diaria,en nuestro desarrollo personal y, en general,en nuestro bienenstar, puesto que pueden ser numerosas las ocasiones en las que nos aporten  distintos beneficios, ya sean emocionales, como afecto, apoyo y comprension, o materiales.” (Relaciones entre Padres e Hijos Adolecentes,2007, editorial Ediciones Culturales Valencia s.a.,  pg 13)  Es claro que los  lazos familiares son de gran importancia en el desarrollo de nuestra personalidad y constituyen un elemento en la toma de desiciones.

miércoles, 20 de octubre de 2010

LA FAMILIA Y EL ROL PREVENTIVO

Los padres ejercen un rol preventivo con los hijos, o sea actúan antes de que aparezca el problema, al:
FOMENTAR LA IMAGEN PERSONAL POSITIVA: si el niño se siente valorado y amado por sus padres y recibe de ellos mensajes de valoración, se sentirá seguro de sí mismo. Para eso es importante:
Reconocer que cada hijo es único; aprender a conocerlo y aceptarlo tal como es.

Asegurarse que se siente querido y demostrarle cariño permanente a través del contacto físico y verbal.
Confiar en él y demostrárselo.
Estar disponible para escucharlo y compartir pequeños momentos.
Respetar su privacidad.
Ayudarle a que tenga éxito en las cosas que emprende y a enfrentar fracasos y errores.
AYUDARLES A MADURAR:
Promover la toma de decisiones responsable.
Darles tareas y responsabilidades, no hacer las cosas en lugar de ellos.
Promover la autonomía, manteniendo el cariño y los límites.
Tener una actitud abierta, flexible y de apoyo frente a los cambios de la edad.
ENSEÑARLES AUTOCONTROL:
Los padres pueden ayudar a sus hijos a manejar y expresar adecuadamente sus emociones (pena, ansiedad, rabia, frustración, etc.) siendo modelo y ejemplo de conducta: frente a situaciones problemáticas o conflictos, no perdiendo el control, mostrando serenidad, reflexionando, buscando alternativas de expresión.
ESTABLECER LIMITES Y NORMAS CLARAS Y RESPETABLES:
Las normas y límites son importantes porque estructuran a los hijos, les ayudan a tener las cosas más claras, a saber lo que hay que hacer y lo que no. Esto le da seguridad. Por esto los límites se van adecuando a la etapa de desarrollo de los hijos, de menor a mayor autonomía.
FOMENTAR LA COMUNICACIÓN AL INTERIOR DE LA FAMILIA:
·         Respetar sus opiniones.
·         Corregir sin descalificar, ridiculizar, sermonear o comparar.
·         Ser leal.
·         Reconocer nuestros errores.
·         Expresarle nuestros sentimientos.
·         Buscar conciliar sus necesidades con las nuestras.
·         Promover un clima de creatividady humor.
Aceptar rebeldía y críticas como parte del proceso de desarrollo.
Promover el uso del tiempolibre en familia.

TIPOS DE CONSUMIDORES

Hay diferentes tipos de consumidores, como:
  • EXPERIMENTALES: la persona prueba una vez por curiosidad.
  • OCASIONALES: la persona consume una o varias drogas de vez en cuando, sin continuidad, la consume cuando se le presenta la ocasión. No hay búsqueda activa de la sustancia
  • HABITUAL: la persona la consume regularmente, se la ha transformado en un hábito y se preocupa de obtenerla. Son personas que generalmente pueden continuar con sus actividades (estudiar, trabajar, etc.)
  • DEPENDIENTE: la persona tiene la necesidad de consumir de forma continuada o periódica la sustancia para evitar los efectos psíquicos o físicos producidos por el síndrome de abstinencia. La obtención y el consumo de las sustancia pasa a la vez a ser la motivacióncentral de su vida.

DROGADICION Y DISCAPACIDAD

Campañas de sensibilización, educación desde edades tempranas y una mayor concienciación social sobre las secuelas de las drogas todavía no han sido suficientes para frenar su consumo. De sobra son conocidos algunos de los efectos negativos del alcohol o del tabaco, sin embargo, existe una gran ignorancia sobre las enfermedades generadas por la adicción a otras sustancias. Enfermedades físicas y orgánicas que, si se dejan sin tratar, acaban declinando en graves trastornos a las personas que las padecen.
Sin embargo, no se puede obviar que la principal causa de discapacidad por el consumo de drogas y alcohol está estrechamente vinculada a los accidentes de tráfico. Su consumo merma la capacidad física y altera la percepción del conductor, repercutiendo en gran parte de los accidentes que se producen al año en España. Entre otras, el tráfico es el principal causante de lesiones medulares y cerebrales, de hecho se calcula que cerca del 10% de los accidentes más graves están relacionados con el consumo de estupefacientes.
La relación que existe entre la adicción a las sustancias tóxicas y la discapacidad surge en personas con un determinado perfil. No todas las personas que consumen drogas terminan padeciendo una discapacidad a causa de los efectos negativos de las sustancias y, ni mucho menos, el hecho de padecer una discapacidad es sinónimo del consumo de drogas. Se trata de una serie de casos con unas características determinadas, pero los que se han dado y se dan son suficientes para profundizar en los riesgos a los que se expone el organismo de un consumidor.
Aunque los efectos que producen al principio las drogas pueden resultar satisfactorios y placenteros, los resultados a largo plazo suelen incidir en el mal funcionamiento de los sistemas corporales. El sistema inmunológico se daña dejando paso a la vulnerabilidad de posibles infecciones. La cocaína, el cannabis, la heroína, el hachís, el crack, las drogas de diseño como el éxtasis o el LSD, son sólo algunos de los ejemplos del amplio abanico de sustancias ilegales que provocan daños físicos y orgánicos en los adictos. Pero no se pueden dejar de lado el alcohol o el tabaco, que aunque gozan de amparo legal y están socializados, sus efectos también resultan muy agresivos con la salud.
El cerebro se daña directamente con el alcohol, con la cocaína a través de inducción a parálisis y con el uso de drogas intravenosas por la oclusión de sedimentos en los capilares del mismo. El consumo crónico potencia daños en la médula ósea por envenenamiento, daños en los nervios craneales o en los nervios óptico y acústico, causando cegueras y sorderas. La toxicidad de estas sustancias afecta negativamente también al aparato respiratorio y al circulatorio.

ESTADISTICAS DE CONSUMO

Alcohol: es la droga de más fácil acceso y de bajo costo, por ello es la droga mas consumido responsable de mayo daño producido en relación a estas sustancias ( accidentes, muertes prematuras, enfermedades, homicidios, desintegración familiar, etc.).
Es consumida entre el 70% y 80% de la población joven: 15% de la población injiera alcohol en forma anormal; 5% presenta síndrome de dependencia alcohólica y 10% son bebedores excesivos.
Alrededor del 20% y el 25% de los jóvenes son abstemios, es decir beben muy ocasionalmente y sin embriagarse. La embriaguez es una situación de riesgo y síntoma de beber anormal. Los daños producidos por la ingesta de bebidas alcohólicas tienen un alto costo de dinero
Tabaco: usa cigarrillo aproximadamente el 80% de los jóvenes, con predominio de hombres, existiendo un alarmante aumento en mujeres adolescentes.
Marihuana: se dice que alrededor del 50% de los adolescentes la ha fumado alguna vez.
Anfetaminas: su uso se asocia a la dependencia en tratamiento de la obesidad especialmente en mujeres o en el uso de algunos grupos laborales, marinos mercantes por ejemplo
Cocaína: de alto costo, su uso principalmente se observa en grupos de mayor ingreso económico y se calcula entre el 7% y el 10% de la población joven. Sin embargo forma mas baratas como la PASTA BASE se estarían introduciendo.
Inhalantes: de fácil acceso como producto de uso domestico, especialmente pegamentos. Su uso se observa en casos de marginalidad social, en niños y adolescentes, y se calcula entre el 5% y el 10% de estos grupos.

martes, 19 de octubre de 2010

Infecciones y Enfermedades causadas por las Drogas

Extasis
Éxtasis
ectasy

La MDMA, llamada "Adam", "Éxtasis" o "XTC" en la calle, es una droga sintética sicoactiva (que altera la mente) con propiedades alucinógenas y similares a las de la anfetamina. Su estructura química es parecida a la de otras dos drogas sintéticas, la MDA y la metanfetamina, las cuales producen daño cerebral.

Las opiniones sobre la MDMA recuerdan aseveraciones similares que se hicieron del LSD en los años 50 y 60, las cuales resultaron ser falsas. Según sus defensores, la MDMA puede hacer que las personas confíen unas en las otras y derribar barreras entre terapeutas y pacientes, entre amantes y entre familiares.

Peligros para la salud


Síntomas físicos y psicológicos. Muchos de los problemas que enfrentan los usuarios de MDMA son similares a los producidos por el uso de anfetaminas y cocaína. Estos son:


* Dificultades psicológicas, incluidas confusión, depresión, problemas para dormir, ansias de usar la droga, ansiedad severa y paranoia durante el uso y a veces semanas después de usar la MDMA (en algunos casos se han informado episodios psicóticos).
* Síntomas físicos tales como tensión muscular, apretar los dientes involuntariamente, náuseas, visión borrosa, movimientos oculares rápidos, desmayo y escalofríos o sudores.
* Aumentos en la frecuencia cardíaca y la tensión arterial, lo cual representa un riesgo particular para personas con enfermedad circulatoria o cardíaca.

Efectos a largo plazo. Investigaciones recientes relacionan el uso de la MDMA con el deterioro a largo plazo de las partes del cerebro que son cruciales para el pensamiento y la memoria. Se estima que la droga causa daños a las neuronas que utilizan la sustancia química serotonina para comunicarse con otras neuronas.

La MDMA también está relacionada en su estructura química y sus efectos con la metanfetamina, la cual ha demostrado producir la degeneración de las neuronas que contratamienton el neurotransmisor dopamina. El deterioro de las neuronas que contratamienton dopamina es la causa subyacente de los trastornos motores presentes en la enfermedad de Parkinson. Los síntomas de esta enfermedad comienzan con falta de coordinación y temblores y con el tiempo pueden resultar en una forma de parálisis

miércoles, 13 de octubre de 2010

PREVENCION

Prevenir es anticiparse, adelantarse, actuar para evitar que ocurra algo que no queremos que pase, en este caso, que se consuman drogas. Pero, si ya se están tomando drogas, prevenir es intentar evitar que el problema vaya a más y, en caso de existir alguna situación de dependencia, ayudar a las personas a recibir tratamiento para superarla y a salir de ella.

La prevención es una labor de todos, no sólo de los expertos en drogas. Se compone de la suma de pequeñas aportaciones que cada uno podemos ofrecer desde el papel que desempeñamos y desde el lugar que ocupamos. Todos tenemos algo que decir y algo que hacer y nadie puede hacerlo todo por sí solo: 

· Los padres fomentando en sus hijos, desde pequeños, hábitos y costumbres saludables, acompañándoles y apoyándoles en su desarrollo personalcomo sujetos responsables, libres y maduros, e informando y dialogando con los hijos sobre las drogas. 

· Los profesores inculcando la importancia de la salud, orientando sobre la manera de mantenerla y mejorarla, priorizando los aspectos educativos sobre los conocimientos y fomentando un clima de relaciones y un ambiente que contribuya a la evolución y a la madurez de sus alumnos. 

· Los médicos y el personal sanitario promoviendo la mejora de la salud de la comunidad, informando objetivamente sobre los efectos y riesgos de las drogas y proporcionando tratamiento a los afectados por su consumo. 

· Los policías y los jueces actuando fundamentalmente sobre la oferta y la disponibilidad de drogas, persiguiendo a los narcotraficantes, etc. 

· Los legisladores promulgando leyes que limiten la venta de drogas legales a menores y que sancionen los comportamientos ilícitos de produccióny venta de drogas. 

· Los trabajadores sociales apoyando y orientando ante situaciones de desestructuración social y marginación que generan mayor debilidad ante las drogas en algunas familias, barrios, ciertos colectivos, etc. 

· Los mediadores y las asociaciones juveniles favoreciendo alternativas de ocio y tiempo libre saludables para los jóvenes, facilitando la formación de nuevos grupos de amigos, etc. 

Datos Del 40° International Council On Alcohol And Addiction. 

· El abuso de alcohol y de drogas muestra una alarmante tendencia en alza. Peor aún: los cambios producidos por la llamada " globalización delmercado mundial" han hecho que la carga que esto implica para los países menos desarrollados haya ido también en aumento. 

· Existen alrededor de 1100 millones de fumadores en el mundo. 

· Anualmente, 3 millones de fumadores, 750.000 bebedores y entre 100 y 200 mil abusadores de drogas mueren como consecuencia de abuso de sustancias. 

En estados unidos: 

· "EEUU ha sufrido en esta década 100.000 muertes relacionadas directamente con la droga." 

· "La drogadicción va en aumento en nuestra juventud. El consumo de todo tipo de drogas entre los 12 y los 17 años de edad aumentó en un 50% entre 1992 y 1994. En un estudio se sometió a examen a más de 20.000 hombres mayores de edad arrestados en 1994. La prueba sobre presencia de droga en el organismo resultó positiva en un 66% de ellos en el momento del arresto." 

· La adicción a las drogas también impone una pesada carga financiera. En 1993 los norteamericanos gastaron 49.000.000 de dólares en narcóticos ilegales. Por otra parte, las pérdidas materiales derivadas de ello le cuestan a esta sociedad 67.000.000 de dólares 

· Sólo uno de cada cuatro consumidores es un drogadicto empedernido." 
· 72.000.000 de norteamericanos han experimentado con drogas ilegales, una mayoría abrumadora renunció a ellas por su propia voluntad y se opone al consumo de narcóticos ilegales."

Diferentes Efectos



Para determinar qué efectos pueden producir las drogas hay que considerar, en primer lugar, cuáles son sus principios activos. Las experiencias y los efectos son distintos en las personas y dependen de diversas circunstancias: 

· La composición y riqueza del producto (cantidad de principio activo, presencia de adulterantes). 

· Las características fisiológicas del consumidor (edad, sexo, complexión física, estado del organismo en el momento de tomar la droga, etc.). 

· La personalidad del consumidor. 

· Las expectativas del consumo (lo que le han dicho que produce y, por lo tanto, espera conseguir al tomarla). 

· Las experiencias previas con la droga en cuestión. 

· La frecuencia de uso. 

· El ambiente en que se toma (espacio físico, personas con las que se consume, etc). 

Algunos jóvenes piensan que limitar el consumo de alcohol o de otras drogas al fin de semana las hace inofensivas, pero no es así. Los jóvenes que abusan del alcohol piensan que ellos nunca serán alcohólicos porque éstos son los que están tirados en la calle; los que abusan de otras drogas piensan que ellos no serán nunca drogadictos, porque sólo lo son los yonquis; ellos nunca llegarán a ser drogodependientes, porque cuando quieran lo pueden dejar, etc. Todas estas afirmaciones ponen de manifiesto la convicción de que se controla, lo que se transforma es un síntoma de riesgo adicional. Siempre creemos que podemos controlar todas las situaciones y, en el caso de las drogas, esta creencia puede hacer que nos confiemos y perdamos de vista los peligros de algo con lo que estamos jugando

Riesgos

Todas las drogas afectan a la salud de las personas y su desarrollo personal. Sin embargo, este dato se potencia aún más en el caso de los jóvenes, puesto que cada vez que se recurre a las drogas como muleta para disfrutar de la vida o enfrentarse a sus exigencias, se está limitando la oportunidad de demostrar y desarrollar los recursos y las capacidades propias.
El consumo de drogas induce, por otra parte, a comportamientos "descontrolados" que se llevan a cabo bajo los efectos de las drogas, conductas, en muchos casos, en las que no se miden los riesgos, ni las consecuencias de lo que se está haciendo.
Un riesgo de las drogas (quizá el más importante) es su capacidad de crear dependencia. Todas las drogas presentan esta característica. Aunque se afirma que algunas drogas no generan dependencia física (cannabis, alucinógenos, éxtasis,etc.), éste es un asunto controvertido. En lo que sí hay unanimidad es en la capacidad de las drogas para provocar dependencia psicológica o emocional. Es cierto que la facilidad para que se cree una dependencia física depende de muchos factores, también lo es que no hay ninguna persona tan segura que pueda afirmar que controla plenamente los riesgos de hacerse dependiente.
Además, muchas de las drogas que se encuentran en el mercado ilegal están con frecuencia sometidas a procesos de adulteración. En estos casos, el posible consumidor no sabe qué es lo que está tomando y, por lo tanto, se sitúa ante unos imprevisibles riesgos añadidos.
Todas dañan la salud y, si se toman con frecuencia, algunas pueden provocar daños irreparables, biológicos o psicológicos. Asimismo, se pueden correr riesgos muy serios si se padece algún tipo de patología, como, por ejemplo, cardíaca o hipertensión, que puede que aún no se haya manifestado o no la haya diagnosticado el médico.
Muchas veces las drogas se ingieren mezcladas unas con otras, por ejemplo; porros y alcohol, éxtasis y alcohol, cannabis y cocaína, etc., sometiendo, de esta forma, al sistema nervioso a sacudidas contradictorias o multiplicando los efectos de ambas sustancias.
También existen riesgos relacionados con comportamientos que los consumos facilitan o impiden controlar (comportamientos impulsivos).

¿Qué es una droga?

Droga es cualquier sustancia que, una vez introducida en el organismo a través de distintas vías (inyectada, fumada o tragada), tiene capacidad para alterar o modificar las funciones corporales, las sensaciones, el estado de ánimo o las percepciones sensoriales (vista, oído, tacto, gusto, olfato). Existen muchas clases de drogas. Algunas son legales como el alcohol, el tabaco o los fármacos; otras son ilegales como el hachís, la cocaína, la heroína, etc. Todas las drogas tienen un denominador común: al ingerirlas (sea cual sea la forma) pasan a la sangre y, a través de ella, al cerebro y a todo el organismo, provocando los diferentes efectos que las caracterizan: excitar, relajar o distorsionar la realidad.